Solté la frase y al instante me dí cuenta: "No sé si cambie para mejor, pero cambié"...
En ese momento repasé todos los cambios que sufrí desde mi niñez. Fue casi mágico.
Mi cuerpo, mi casa, mi voz, mis gustos, mi escuela, del primario al secundario, otro cambio de colegio, de trabajo, de actitudes, de gestos, otro cambio de casa... cambié amores.
Angel, fiel compañero de notas y aventuras periodísticas, mejor amigo, actual y circunstancial compañero de trabajo, había definido una situación con su particular capacidad de síntesis: "Les digo a los afiliados que no los vas a atender porque estás escribiendo". Allí solté la frase en cuestión.
Cambios.
Siempre dije que fui malinterpretado. Debía tener una explicación a flor de piel cada vez que me concentraba para escribir. Nadie podía molestarme porque mi cara decía todo: todo lo contrario en realidad.
Entrecejo fruncido, ojos fríos, duros mirando el monitor, gesticulando cuando no salía la frase que uno quería... tan ensimismado estaba en mi tarea que muchas veces ni escuchaba a mi gente alrededor.
Improperios: varios, diversos y de todos los colores cuando no salía lo que uno quería escribir y se daba cuenta que no tenía sentido lo que uno intentaba expresar.
Mejor no les cuento cuando uno iba por la mitad de la nota y se cortaba la luz, en las tardes/noches de calor tucumanas. Hoy, me sonrojo recordando.
Algunas veces me iba al extremo: música a todo volumen (gracias walkman), rock 'n roll preferentemente, si quería que las cosas surgieran rápido y con cierto tono positivo, anteojos oscuros... en fin, cosas de juventud.
Hoy, tengo los lentes puestos, los chicos corretean a la vuelta mientras escucho de fondo las estridentes risas y voces de los canales de televisión dedicados en exclusiva para ellos (nadie les avisó que existen personajes como La Pantera Rosa, El Correcaminos o Tom y Jerry, que no hablaban?... Dios).
Cambié muchas cosas: dejé el cigarrillo, volví a los deportes, ahora tomo más vino que cerveza... cambios. Algunos imperceptibles, otros más profundos, más pensados, más trascendentes.
Sin embargo, con Angel hablábamos un poco más sobre el tema.
Lo importante es que la esencia no cambie. Eso que te hace único frente a los demás. El resto, pueden ser cambios superficiales o mejor, acomodamientos a las distintas realidades.
Nadie sabe cómo le va a cambiar la vida en una semana escuché por ahí.
Claro, es que hay veces que uno no busca los cambios. Lo encuentran.
Entonces hay que tener la capacidad del río de adecuarse según las estaciones del año.
Pero a pesar de todo, no dejar de ser río.
En la ruta del aprendizaje uno puede adquirir conocimientos valederos que ayudarán a convertirse en mejor persona. O no.
De uno depende.
Y que los cambios, no terminen por transformarte de manera que ya nadie te reconozca.
"No cambies nunca"... ¿no te lo escribieron alguna vez?
20 comentarios:
Hola Horacio... lindo texto, me hiciste pensar en todo lo que cambia uno en tan poco tiempo. Lo bueno de los cambios es que más allá de ser buenos o malos, uno aprende siempre.
Besos
Los cambios son buenos y son esenciales para el crecimiento, pero es verdad que debemos luchar a brazo partido para no cambiar en esencia… por que entonces nos perdemos.
Bien por vos que dejaste el pucho y volviste a los deportes (que son los deportes(?):P).
Me hubiera gustado verte escribiendo en una redacción con walkman y anteojos negros :P.
Me lo dijeron varias veces.
Pero es inevitable.
Hay esencias, hay algo nuestro q no puede cambiar, y q experiencias buenas o malas no logran hacerlo.
Mientras q otras partes, más flexibles, que quizá fuimos adquiriendo en el camino, de repente, con ciertos momentos, se van modificando.
Podría decir mil veces q soy muy poco de lo que era, y sin embargo la gente me sigue viendo igual.
Quién tendrá la razón??
De verdad no sé.
Besos
Gaby: hola, niña! Qué alegría saber de tí! Gracias por tus palabras. Y sí, queda lo que se llama experiencia luego de los cambios. De uno depende aprovecharlos. Espero que estés bien. Besos.
Rafa: hermano,algunas veces caemos en las redes del mimetismo y debemos rescatarnos para no perdernos. Y si de cambios se trata, ¿quién te dice que no tengas la oportunidad de verme con anteojos negros, walkman y un teclado enfrente? Todo puede ser... Un abrazo.
Cindy: No cambies nunca... creo que es una frase preferida cuando cruzamos las aguas adolescentes, donde todo parece más puro. Sí alguien todavía te dices que "estás igual", alégrate mujer, sigues siendo la que eras. Si te gustaba serlo, no cambies. Besos.
Horacio, hay una frase que tiró un tiempo atrás una tal Mercedes Sosa, que creo es cantante. Decía: "Cambia, todo cambia" Perfecto, como siempre. Saludos.
Podemos cambiar, de hecho que la vida nos obliga a ello pero lo íntimo, lo esencial, no se cambia.¿Cómo es el dicho? "El hábito no hace al monje". Seguí como te conocí, tan particular. Besos Pipina
Hola Horacio...que lindo tema el de los cambios, algunas veces tenemos miedo a lo que pueda venir con ellos.Tus cambios fueron para bien y me alegro por vos.
Tu cambio de foto no me gustó mucho, tu mirada es muy dura, en la anterior es tierna y con una linda sonrisa.
Ja, qué lindo texto Horacio! Sí, me dijeron muchas veces el "no cambies nunca", y no sé si alguna vez logré entender del todo el objetivo de esa frase. Sin embargo, a pesar de todos los deseos cambié, y cambio. No sé si para bien o para mal, aunque a veces, cuando me encuentro con mis compañeros de la secundaria todos insisten en decirme "¿cómo hacés para ser igual que siempre?". Yo sólo sonrío... Es muy difícil y largo de explicar que no es así... Un abrazo.
complicado el tema... y con esto ya te digo que te voy a soltar mi segundo testamento jajjaa.
En fin, vamos allá.
A fin de cuentas, hablas en su mayoría de evolución, y la evolución, depende como quieras utilizarla, debería de ser buena, aunque ya vemos que no siempre es así.
Los cambios son buenos y/o malos. VAmos allá:
-Cambios buenos, todos aquellos que nos hacen rectificar en lo que nos equivocamos, por ignorancia, tozudez, o soberbia. ES la evolución del ser a base de tropiezos, desengaños y demás, que nos ayudan a formarmos en teoría en mejores personas.
Yo cuando oigo, si volviera hacia atrás volveria hacer lo mismo, me horroriza, porque parece que entonces no has aprendido nada ni evolucionado. Yo si volviera atrás, sin saber lo que sé ahora, haría lo mismo, porque todo lo bueno y mal hecho, lo hice de buena fé, sin saber si obraba mal; pero si pudiera volver atrás sabiendo lo que sé, hay muchas cosas que no volvería hacer, porque sin querer dañé, me equivoqué, o tome caminos no correctos. Y en eso está evolucionar, y hacer cambios.
-Otra parte del cambio, cuando estás mal, pero no te atreves a hacer cambios por miedo al fracaso, a estar peor, por costumbre... . Ahí es donde el cambio sería buena, pues de alguna manera se debería romper ese círculo que te hace infeliz. Ya dicen por ahí que no hay nada que te deje avanzar menos que el temor, y por tanto, para las gentes temorosas, se debería obrar este cambio.
-La parte negativa. Cuando resulta que esas vivencias, en vez de hacerte reaccionar bien, te hacen ser peor persona, o bien porque estás cansado que te tomen el pelo o te hagan daño. Ahí es cuando el cambio es pésimo.
-Cuando no valoras lo que tienes. Siempre tendemos a ver que lo que tiene el de al lado es mejor, "mira ese que mujer tiene, cuanto se arregla, que bonita está para la edad que tiene, mira que coche, mira que jardín, mira que bla bla bla" y por tanto deseamos tener esas cosas, devaluamos a nuestra pareja, porque nos damos cuenta que esa mujer está mejor, pero no pensamos en que igual esa mujer tiene señora de la limpieza, y tiene horas a la semana para ir al gimnasio, para descansar, e ir a la peluquería, mientras tu mujer no tiene horas para ella misma.. (digo mujer, pero también las mujeres cuando piensan así de sus maridos), no nos damos cuenta, que igual tienen el mejor coche, pero quizás para tener ese mejor coche, no tienen horas de verdadera familia, etc, etc... sin embargo, creemos que esa vida es mejor que la nuestra, no valoramos lo que tenemos, y al final, acabamos con todo ello.
Cada vez se dan mas situaciones de este tipo, y es una pena, porque cuando ya eres feliz como eres o con lo que tienes, para qué quieres un cambio? para mejorar? pero como vas a mejorar, si ya eres feliz, ya estás bien? En fin, es el cambio del incorformismo, o el de los celos, que suele ser pésimo para la familia.
jajaja, ves, rollete padre!!!
Besines
aps por cierto, soy Ena, que no recuerdo si te había posteado alguna vez con este espacio.
Chichem: dicen que la canción que escuchaste de la Negra Sosa, es de un poeta chileno Julio Numhauser. En una parte dice así. "Cambia el pelaje la fiera, el cabello el anciano y así como todo cambia, que yo cambie no es extraño
Pero no cambia mi amor, por mas lejos que me encuentre...". Un abrazo.
Pipina: gracias. Un beso.
Anónimo 1: yo también me alegro de algunos cambios. De otros, no tanto. Pero valieron la pena el aprendizaje. Saludos.
Anónimo 2: ja! pareces que me conocés más de lo que quisiera. en fin, por ahora es la que hay. Veré si la cambio más adelante. Es cuestión de probar. En la variedad está el gusto, dicen. Saludos.
Maby: ¿por qué explicar los cambios? Si te hicieron bien, pues, no hay que explicar. Si no hicieron o te hacen mal, te darás cuenta y lo corregirás. Lo hermoso es cambiar por convicciones, no por obligaciones. Otro abrazo para tí.
Ena: largo, pero bello como siempre. Dais en el clavo con esas reflexiones. ¿Cómo dejar de leerlas? Y sí, Duende, sabías que eras tú. Besos.
"...Entonces hay que tener la capacidad del río de adecuarse según las estaciones del año.
Pero a pesar de todo, no dejar de ser río..."
como siempre tus pots son muy lindos y entretenidos.
un abrazo hermano¡
Pues gracias, aunque mi poder de síntesis sea nefasto.
Venía a preguntarte algo y se me fue el santo al cielo, ... en fin, si me acuerdo luego regreso.
Ah si, el nombre del grupo que me dejaste, no encuentro la canción que comentabas, sabes alguna dirección donde la pueda escuchar?
Miguel: otra abrazo para ud. Pirata. Gracias por pasar y ser como sos.
Brujilla: sí, está en You Tube... es del '82. El tema se llama "Salir de la melancolía", de Serú Giran. Espero te guste. Besos.
La mente que no cambia es como agua estancada, no sirve para nada nisiquera para reflejar la vida
Querido Diego: Usted lo dice cada vez que visito su blog. La síntesis perfecta, diría.
Un abrazo.
En cuanto al cambiar vi que pusiste una estrofa, si me permites transcribo toda la letra de esta bella canción.
"Todo cambia"
Cambia lo superficial
Cambia también lo profundo
Cambia el modo de pensar
Cambia todo en este mundo
Cambia el clima con los años
Cambia el pastor su rebaño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño
Cambia el mas fino brillante
De mano en mano su brillo
Cambia el nido el pajarillo
Cambia el sentir un amante
Cambia el rumbo el caminante
Aúnque esto le cause daño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia el sol en su carrera
Cuando la noche subsiste
Cambia la planta y se viste
De verde en la primavera
Cambia el pelaje la fiera
Cambia el cabello el anciano
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño
Pero no cambia mi amor
Por mas lejos que me encuentre
Ni el recuerdo ni el dolor
De mi pueblo y de mi gente
Y lo que cambió ayer
Tendrá que cambiar mañana
Así como cambio yo
En esta tierra lejana
Saludos Pilar
como vos decís es muy bueno seguir reconociéndose uno mismo, sobretodo después de atravesar ciertos cambios vertiginosos en lo q a uno le toca vivir
hace más de un año mi vida dio un vuelco tremendo, luego de un tiempo en el q estuve mal, un día salí con amigos y uno me dijo:
"qué suerte que pasaste por todo esto, porq ahora estás más vos que nunca, más Ivy que nunca"
Ivy: y qué bueno que lo reconozcan tus amigos. Felicitaciones por volver a ser Ivy. Un beso.
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